El 11 de enero de 2015, el reportero Jesús Medina Ezain informó a IPYS Venezuela que una persona desconocida, y que se identificó como un trabajador de Empresas Polar Pepsi, cuando hacía una cobertura sobre una fila de al menos 100 personas en los alrededores de un supermercado en la avenida Rómulo Gallegos, al este de la ciudad de Caracas. El hecho ocurrió el viernes 9 de enero de 2015.

Jesús Medina Ezain relató a IPYS Venezuela que el viernes 9 de enero de 2014 se encontraba grabando y entrevistando a varias personas que esperaban comprar artículos para el hogar, cuando un hombre le dijo que no tenía derecho alguno de grabar los rostros de las personas. El reportero, quien sabe que está permitido registrar imágenes de los hechos que ocurren en la vía pública, continuó con su labor.

En ese momento, el reportero sintió un golpe en la espalda, y cuando dio la vuelta, pudo darse cuenta que el hombre era el agresor. Aseguró que el mismo se identificó como un trabajador de empresas Polar Pepsi. Las personas que estaban en la cola intervinieron en el altercado entre este sujeto, y el reportero, quien actuó en defensa en propia.

Esta agresión se enmarca en una serie de hechos que involucran la denuncia de al menos 7 reporteros a los que se les impidió cobertura sobre las filas de personas en supermercados, así como la detención de dos reporteros el 10 de enero de 2015.

El artículo 57 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela establece que toda persona tiene el derecho de expresar libremente sus ideas y opiniones, y para ello puede hacer uso de cualquier medio de comunicación y difusión, sin que pueda establecerse censura.

Por otro lado, el numeral 5 de la Declaración de Principios sobre Libertad de Expresión de la Organización de Estados Americanos (OEA) establece que la presión directa e indirecta sobre cualquier expresión, opinión o información difundida, a través de los medios de comunicación, debe estar prohibida por la ley. Además, su artículo 9 señala que los hechos de amenaza e intimidación a los comunicadores sociales violan los derechos fundamentales de las personas y coarta severamente la libertad de expresión.

Leyenda: Medina Ezaine aseguró que este hombre fue quien lo agredió y se identificó como trabajador de empresas Polar Pepsi